Con la llegada a la presidencia de la FIP (Federación Internacional de Padel) hace poco más de un año del responsable italiano Sr. Daniel Patti, se abre una nueva etapa en la misma. Un tiempo clave para el futuro de nuestro deporte, en el que sin duda la FIP debe jugar el papel de liderazgo. Tengo la suerte de tener cierta comunicación de carácter técnico con la FIP y eso me ha permitido poder contactar con el presidente para tener la información necesaria para este artículo.
El reto de la FIP, aunque fácil de definir, es hercúleo: conseguir la definitiva expansión internacional del pádel. Después de más de veinte años desde el nacimiento de la FIP, el pádel ya ha demostrado ser un deporte capaz de atraer a masas en dos países: Argentina primero a finales de los 80 y principios de los 90 y España algo más tarde con el actual boom, impensable hace tan solo unos pocos años. Es este factor sin duda alguna el que aporta confianza en que la consolidación definitiva del pádel puede ser un hecho.
La situación que se encontró el nuevo presidente a su llegada es una FIP compuesta por 18 federaciones, con un nivel de desarrollo en los países representados muy dispar. Tanto, que en algunos de ellos el pádel es un deporte testimonial en pleno nacimiento y en España es un deporte de masas, con millones de practicantes y un circuito profesional que permite a varios jugadores vivir exclusivamente de la competición y eventos asociados a ella.
Puestos al habla con el presidente de la FIP, éste me comenta cuáles son sus proyectos para ese gran reto. Desafío que me concreta en una “voluntad de seguir sumando países a la FIP y ayudarles en su crecimiento organizado”. En el primer año de la nueva Junta Directiva ya se han incorporado 3 países: Alemania, Holanda y República Dominicana. No es poco sumar una sexta parte de nuevas federaciones en solo un año.
Asimismo, los ejes fundamentales de su actuación son y serán los siguientes:
- Dar continuidad a los mundiales absolutos, de menores y open. Reforzar las competiciones continentales europea y americana y extenderla a menores. En este sentido es voluntad de la FIP el incentivar a los diferentes países para que soliciten la organización de estas pruebas.
- Clasificar los cursos de formación. Quizás no sea este el aspecto más importante para el pádel español debido al desarrollo actual pero sí es fundamental para ayudar al crecimiento en nuevos países.
- Fomentar el nacimiento de la asociación internacional de la industria del pádel.
- Mejorar el Reglamento de Juego. Recordemos que es una atribución exclusiva y básica de la FIP la definición de las reglas del juego, con el importantísimo fin de conseguir que en todo el mundo se juegue con las mismas normas.
- Proponer un Normativa Técnica completamente revisada. Normativa que regula la competición de la FIP. Incrementar además el número de competiciones FIP (tenéis toda la información de las competiciones, normativas etc en su web www.padelfip.com).
- Finalmente es deseo de la FIP, y tiempo lleva trabajando en ello, solicitar este mismo año la integración en SportAccord, una organización internacional que reúne a la gran mayoría de federaciones internacionales. SportAccord es de alguna forma el club de los deportes mundiales y la presencia de la FIP daría finalmente al pádel el reconocimiento del resto de grandes deportes mundiales, algo sumamente importante para nuestro futuro. Está siendo un duro trabajo para la FIP que ha requerido entre otras acciones la elaboración de unos nuevos Estatutos, presentados en la última Asamblea de noviembre de 2013.
Como veis, los proyectos presentados son positivos, necesarios y pienso que bien encaminados. Tengo claro además que de su éxito depende el bienestar futuro de todos nosotros. O alguien piensa que el pádel continuará con este crecimiento solo en España sin el apoyo del resto de países? O que es creíble pensar en un deporte de éxito en un solo país a largo plazo? La FIP tiene unos recursos limitados y necesita de la ayuda de todos; de las federaciones, de la industria del pádel y del circuito profesional. La unión hace la fuerza, dicen, y es tiempo de demostrarlo.