Esta semana hemos tenido un nuevo acto en la batalla por el control del pádel profesional. El anterior circuito profesional PPT (Padel Pro Tour) demandó hace unos meses a la asociación de jugadores profesionales de pádel, AJPP, porque según creen ésta última no cumplió parte del contrato firmado en su día. En concreto la demanda se basa en un supuesto derecho de preferencia en la renovación del contrato de la AJPP con el organizador de turno del circuito profesional, una vez terminado el contrato anterior. Por su parte la defensa de la AJPP se basa en demostrar que no han vendido sus servicios a un tercero, en cuyo caso sí tendría sentido el derecho de preferencia, sino que son ellos mismos los organizadores del circuito WPT.
PPT solicitaba como medida cautelar la paralización del circuito WPT, medida no considerada como procedente por el juez, basando su petición en que la puesta en marcha del nuevo circuito pondría en peligro una hipotética sentencia favorable al PPT. Llegados a este punto caben varias consideraciones:
Es de agradecer que finalmente PPT deje de justificar de forma recurrente sus actuaciones en función de un supuesto “amor” al pádel, y finalmente, en el último comunicado, solo hace alusión a temas jurídicos, a demandas, a peticiones de suspensión y a contratos incumplidos. Se acabó envolverse en una bandera que, para los que llevamos en esto muchos años, nos chirriaba un poquito, ya que parecían transmitir que el pádel había empezado con ellos.
Por otra parte en el comunicado de esta semana no se menciona para nada la abultada deuda que PPT tiene contraída con los jugadores. Deuda que proviene de premios en metálico de torneos no pagados en una gran parte. Es decir, PPT no paga pero pretende que los jugadores sigan compitiendo en su circuito.
Para finalizar solo mencionar que estoy convencido de que PPT es consciente de que la reconciliación con los jugadores es prácticamente imposible (en tal caso los jugadores perderían toda su credibilidad). Así pues PPT parece que solamente busca una compensación económica, justa en todo caso si el juez así lo dictamina. Compensación con la que podrían pagar sus deudas.